Mayo 2022
- Pen & Stitches
- 23 jun 2022
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 10 oct 2022
Mayo del año dos mil veintidós. El mes más largo. El mes en el que viví tantas cosas, que todavía no me explico cómo todo pasó en un solo mes.
Viajé y visité una ciudad que me encanta y me gozo cada vez que voy. Disfruté a mi familia que amo, platicamos, reímos, lloramos, nos abrazamos y vivimos juntos días caóticamente alegres. La música formó parte importante del viaje porque vimos a The Killers en vivo; una experiencia espectacular. Al mismo tiempo, una amistad se hizo más fuerte y, estoy segura que para toda la vida. Reí, lloré, platiqué mucho y disfruté cada momento.
Me enfermé, sufrí el encierro y estar sola tanto tiempo: sin siquiera hablar y al hablar, darme cuenta que casi ni me salía la voz. Enfrenté el miedo del virus, al que tanto he temido desde hace 2 años. Confirmé mi confianza en la ciencia y en lo que han creado con las vacunas. Estoy segura que me ayudaron.
Y, aquí estoy, agradecida por tanto y por todos. A todos los que están y han estado a mi lado. Quienes me han secado lágrimas y también aquellos que me han preguntado si ya me recuperé. A todos los que me han abrazado y con solo estar, hacerme sentir que todo está caminando para bien.
No me había atrevido a escribir esto porque sabía que iba a llorar y sí, aquí estoy llorando: lágrimas de felicidad al recordar a mis niños y "los días más felices", lágrimas que llevan todo lo que he dejado atrás y lágrimas llenas de esperanza por el futuro y que los mejores días están por venir.
A finales de abril, sabía que la vida daría un giro de 180°, no tenía idea de lo que sería y, a pesar del torbellino que ha sido y sigue siendo, todo ha estado y estará bien.
Texto escrito el 1 de junio de 2022. Editado el 23 de junio de 2022.
Comments